El injerto de hueso dental es un procedimiento quirúrgico que se realiza para aumentar la cantidad de hueso en el maxilar o la mandíbula cuando no hay suficiente hueso para soportar implantes dentales.
El injerto de hueso dental es un procedimiento quirúrgico utilizado para aumentar la cantidad de hueso en el maxilar o la mandíbula, permitiendo la colocación de implantes dentales en pacientes que no tienen suficiente hueso natural. Este procedimiento implica la adición de material óseo, que puede ser tomado del propio paciente (autoinjerto), de un donante humano (aloinjerto), de origen animal (xenoinjerto) o materiales sintéticos, para proporcionar una base sólida y estable para los implantes dentales.
En Clínica Chamberí, contamos con un proceso de injerto de hueso dental comienza con una incisión en la encía para acceder al hueso, seguido de la colocación del injerto en la zona deseada. El área se cierra con suturas y se deja que el injerto se integre con el hueso existente, lo cual puede tomar varios meses. Este procedimiento no solo facilita la colocación de implantes dentales, sino que también previene la futura pérdida ósea y mejora la función y estética dental.
En Clínica Chamberí, realizamos implantes dentales permanentes fusionados con el hueso proporcionando una solución robusta y duradera para el reemplazo dental. El precio puede variar dependiendo de la complejidad del caso, la necesidad de procedimientos adicionales (como injertos óseos) y el tipo de prótesis dental seleccionada. Sin embargo, garantizamos calidad del servicio a un precio competitivo. Ponte en contacto con nosotros para más información sobre tratamiento o las diferentes opciones de financiación. Contáctanos hoy y descubre cómo podemos ayudarte a recuperar tu sonrisa y funcionalidad dental para toda la vida.
Implantes óseos dentales para sustituir raíces de dientes naturales, permitiendo colocación de coronas, puentes o prótesis dentales.
Se hace una incisión en la encía para exponer el área donde se necesita el hueso.
Se coloca material de injerto óseo en el área preparada. Este material puede ser hueso autólogo (del propio paciente), hueso de un donante, hueso sintético o una combinación de estos.
El injerto se cubre con una membrana protectora y se sutura la encía para mantener el injerto en su lugar.
El injerto óseo se integra con el hueso existente, lo que puede tomar varios meses antes de que el área esté lista para la colocación del implante.
Estamos a tu lado para ayudarte a elegir al tratamiento que realmente necesitas y para ofrecerte las mejores comodidades y financiación.
En nuestra clínica, disponemos de una amplia gama de servicios dentales en diversas especialidades, convirtiéndonos en tu opción confiable para el cuidado de tu salud bucal. Explora nuestro catálogo completo y no dudes en comunicarte con nosotros para aclarar cualquier pregunta. Además, proporcionamos varias opciones de pago y planes de financiación adaptados a tus necesidades.
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La Clínica Chamberí, situada en el barrio madrileño de Chamberí, ofrece alternativa natural para la pérdida de piezas dentales mediante el injerto de hueso dental. Nuestra atención personalizada y enfoque innovador, no sitúa a la vanguardia del sector dental. ¡Visítanos y experimenta el compromiso con tu salud dental de la Dra. Paloma González Rodríguez, junto con su equipo de expertos!
Este procedimiento es necesario para pacientes que no tienen suficiente hueso para soportar implantes dentales debido a la pérdida de dientes, enfermedades periodontales, o reabsorción ósea natural.
Tu cirujano dental o periodoncista evaluará tu caso mediante radiografías y tomografías computarizadas para determinar la cantidad de hueso disponible y la necesidad de un injerto.
La recuperación inicial dura aproximadamente una a dos semanas, con varios meses necesarios para la integración completa del injerto óseo antes de la colocación del implante dental.
El procedimiento se realiza bajo anestesia local, por lo que no sentirás dolor durante la cirugía. Después, es común experimentar molestias, hinchazón y dolor, que pueden ser manejados con medicación prescrita por tu dentista.
La cirugía puede durar entre 1 a 2 horas, dependiendo de la complejidad del caso y la cantidad de hueso que se necesite injertar.